Blog de política actual: Análisis y reflexiones sobre política española

viernes, 27 de marzo de 2020

¿Tiene futuro la Unión Europea?

Esa es la gran pregunta que me hago desde hace ya unos años. Europa más que ayudar, asfixia y discrimina a los países mediterráneos tratándoles de diferentes, o si se me permite la expresión, de inferiores (como si de razas se tratase).
Sabiendo que esta discriminación viene de lejos, imaginaos cómo es ahora, si encima, los países más afectados (por no decir que prácticamente los únicos, en cuanto a grandes cifras de mortandad y contagio) son España, Italia y Portugal (en menor medida).

Tanto España como Italia se han plantado ante la inacción de la Unión Europea respecto a la crisis del coronavirus.
¿La causa del desencuentro con el resto de Europa? La petición de coronabonus, una medida para parar y mutualizar la deuda a nivel europeo del avance del virus. Por lo que se sabe, Ursula von der Leyen, presidenta de la comisión europea, antes de que se pusiera sobre la mesa esta medida, ya afirmó que: "cuando Europa realmente necesitaba de apoyo mutuo y del todos para uno, hubo demasiados que solo miraron por su propio interés y se refugiaron en el todo para mí".




La medida ya ha sido aplazada o "rechazada" (depende de cómo se quiera ver) dos veces por parte de los grandes responsables de la instituciones Europeas.

En un primer momento, el presidente de España y el primer ministro de Italia, Pedro Sánchez y Giuseppe Conte respectivamente, exigían la aprobación de medidas "Keynesianas" para luchar contra la crisis; y como he dicho antes, además, se reclamaba la mutualización de todo el aumento de la deuda pública asociado al coronavirus.

Pero la mayoría de países como Holanda o Alemania se han opuesto rotundamente a estas medidas (a mi parecer, lógicas viendo la que se nos viene encima).

Pero la máxima tensión vivida en la cumbre europea se ha producido con la respuesta de Holanda hacia los países mediterráneos (que son los que han solicitado estas medidas). El ministro de economía holandés Wopke Hoekstra, en su respetiva comparecencia, ha llegado a decir que España e Italia deberían ser investigados para determinar por qué no tienen margen presupuestario para luchar por ellos mismos contra el coronavirus. Es decir, se nos tacha de mentirosos e encubridores, ya que como todos sabéis, más allá de los Alpes, se dice que el coronavirus es un simple resfriado sin más (palabras de Boris Johnson).

Este ataque mediático ha sido rápidamente contestado por el primer ministro portugués António Costa, que ha explotado (defendiendo a España) y calificado las palabras de Wopke como " discurso repugnante en el marco de la Unión Europea" o "de absoluta inconsciencia".

Como podemos ver, Europa no está unida, ni nunca lo ha estado. La discriminación hacia los países mediterráneos llega hasta tal punto que, ante una crisis que no entiende de banderas, himnos, ni fronteras, se llega a actuar con supremacía (como en el caso de Holanda). Lo único que parece que funciona es la unión monetaria (y con muletillas, como Inglaterra y su libra lo habían sido hasta hace nada).

En Twitter, se ha llegado a hacer tendencia el #SPEXIT, el cual critica la actitud y condescendencia de Europa, y aboga por una unión mediterránea, lejos de toda discriminación "sureña".

Lo que está claro es que esta crisis va a poner a prueba, no sólo la economía Europea, sino también su convivencia, su "humanidad", que es mucho más importante que cualquier frontera geográfica que nos separa.

¿Cuál será el futuro Europa?¿Unión o separación? Lo dejo a vuestra imaginación.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Popular Posts

Blogger templates